martes, 6 de febrero de 2007

Reportaje a Gustavo Fontán (Reporter, 30-1-07)

Filme de Gustavo Fontán "El árbol" indaga sobre la vida y la muerte


Por Laura Lunardelli

A través de la metáfora de la vida y la muerte de dos acacias, la película de Gustavo Fontán "El árbol" indaga sobre la vida y la muerte de los seres humanos.

Versos del poeta Juan Ortiz preanuncian la trama del filme: "¿Hay entre los árboles una dicha pálida, final, apenas verde, que es un pensamiento ya, pensamiento/fluido de los árboles, luz pensada por estos al anochecer?".

Una pareja mayor, los padres del director (Julio Fontán y María Merlino), son filmados en su propia casa natal del barrio de Banfield, en el Gran Buenos Aires. Discuten sobre la conveniencia de cortar o no la vieja acacia que crece enfrente de la puerta de su hogar.
"Todas las circunstancias de la película son reales. Se parte de dos acacias que están en la puerta de la casa natal; una de ellas parece muerta. Mis padres saben que se está hablando de sus vidas y de la proximidad de la muerte", explicó el realizador.

Sobre la inclusión de sus padres no-actores como protagonistas del filme, Fontán explicó, entre bromista y realista, la decisión: "Son padres muy obedientes y casi no hubo que convencerlos. Les dije que íbamos a rodar una película y que no iba a haber de parte de ellos necesidad de actuar".

El realizador comentó a Reporter que la filmación llevó unos dos años, dado que era de especial interés "la indagación sobre el paso del tiempo".

Fontán también dio detalles sobre la financiación de su filme. "Se logra con el sueldo de uno y algún pequeño aporte como el de mi largo anterior (Donde cae el sol)"... -confió-.
"...La película fue rodada en video; la encerrona vino después en la posproducción. Entonces la apuesta fue que la película fuera invitada a festivales, para poder ir al Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales y solicitar un adelanto del subsidio y, así, poder ampliarla a 35 milímetros y hacer la mezcla de sonido".

Igualmente, para Fontán un presupuesto mínimo no es sinónimo de un filme mínimo. "Cuando se habla de presupuesto chiquito en la realización de una película se ve como un déficit, pero no es un déficit en tanto sea el presupuesto que requiere la película. La pregunta es cómo se hace con bajo presupuesto para generar una estética que no delate el bajo presupuesto. Por esto el cine no debe perder su capacidad de experimentación".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vi la película. Me gustó mucho. Felicitaciones al director. Se puede hacer cine argentino y del bueno. Esta es una prueba.

Darío
Barracas